Llevaba
meses viendo esta novela en la sección de libros de unos grandes almacenes, lo
ojeaba continuamente y no me disgustaba la sinopsis que aparecía en el reverso
del mismo; no tenía ningún motivo especial para dejarlo una y otra vez, pero lo
cierto es que no me decidí a comprarlo, tal vez pensé que era una historia más
de suspense con buena campaña comercial y que como muchas de ellas acabaría decepcionándome.
Al parecer el destino estaba marcado y llegó hasta mí gracias a un regalo muy
acertado de un amigo, que temeroso de que ya lo hubiera leído, venía con cierta
cautela por la posible “metedura de pata”; acertó y sin más excusas le di la
oportunidad que tanto le había venido negando.
“¿De quién te escondes?» Al final Simon tiene que
hacer esa pregunta a Nathalie. Dos días atrás se tropezó con esta joven en la
playa. Estaba demacrada y asustada, y él se ofreció a ayudarla. Una decisión
impulsiva que se ha vuelto en su contra, pues desde entonces se han visto
envueltos en una espiral creciente de violencia y muerte, que les ha convertido
en blancos..., ¿de quién?
Nathalie no está simplemente perdida o desamparada,
como él creyó. ¿Es una víctima? ¿Es culpable? ¿Qué está pasando?”
Efectivamente es un trhiller psicológico con todos los ingredientes del
género del suspense y la intriga. La autora alemana narra una historia a través
de dos tramas paralelas que en principio no parecen tener nada que ver, pero
que a medida que avanza el relato confluyen hilvanadas con acierto y
justificación. Cada trama a su vez goza de una ambientación propia, París y
Sofía, sirven de escenario al devenir de los acontecimientos vividos por los
personajes de la novela.
No me sentí intimidada por sus casi seiscientas páginas, el prólogo inicial
es un acierto muy de aplaudir, hace un efecto “pegamento”, y aunque parece un
despegue lento y la protagonista en cuestión tarda en volver a aparecer,
siembra esa desazón por averiguar el destino de la joven que escapa de sus
secuestradores en los suburbios del París más sórdido.
Respecto a los temas que aparecen en el libro son de rabiosa actualidad,
además de reconocer, que el tratamiento que hace Charlotte de ellos me gusta;
la delincuencia internacional, la corrupción policial y política, la trata de
blancas, las organizaciones criminales, el alcoholismo y hasta la anorexia,
están muy bien reflejados hasta el punto de invitarnos a una severa reflexión
acerca de la condición humana.
Un elemento fuerte de la novela son los personajes, todos muy corrientes y
todos víctimas de situaciones dramáticas e inesperadas. La escritora los ha
perfilado al detalle y ha conseguido crear empatía con algunos de ellos,
especialmente por la carga de realismo que acarrean, sabiendo que por desgracia
muchas de sus vivencias son parte de la más cruda realidad.
Lo tiene todo, secuestros, asesinatos, mafias, persecuciones, peligros, huidas
frenéticas, muertes accidentales y sorpresas que garantizan un ritmo adecuado y constante. La atmósfera
creada me ha parecido un punto a favor del argumento, aunque a veces se hace
asfixiante, se suaviza con el lenguaje y prosa sencilla, los diálogos largos y
la división en capítulos breves. A pesar del posible inicio algo confuso por
las dos líneas argumentales paralelas y la aparición continua de personajes, se
configura un cuadro muy coherente para una historia que es bastante buena.
Me ha gustado porque la intriga y el suspense está bien dosificado, el hilo
de la historia se sigue sin problema, el estilo es sencillo y sus personajes
están caracterizados con lógica, con sus virtudes y sus defectos. Tal vez el
final lo encuentre forzado, aunque no deja de ser previsible a partir de la
mitad de la novela.
Muy psicológica, es más te invita a reflexionar cuando lo terminas acerca
de las decisiones que tomamos en nuestra vida y las consecuencias impensables
que pueden llegar a depararnos. Os gustará porque creo que se sale de la típica
lectura de “playa”.
"No te preocupes por las personas de tu pasado, hay una razón por la que no están en tu presente".
No hay comentarios:
Publicar un comentario