Desde que inicié la andadura de mi blog de
lectura, miro hacia atrás y recuerdo la cantidad de libros leídos que me
gustaría haber comentado de haberlo creado muchos años antes. Cuando el tiempo
libre me lo permite, vuelvo a releer novelas que me dejaron un grato recuerdo y
que a menudo recomiendo a la gente que me rodea. Pero son pocas las ocasiones y
esa tarea soy consciente de que nunca la voy a poder tener al día. Es por ello,
que he decidido abordar aquellas lecturas de una manera breve y a modo de
recomendaciones que podréis ampliar visitando otros blogs en los que seguro
encontraréis reseñas muy de vuestro agrado.
De momento las iré nombrado y contando su
sinopsis, sin en alguna ocasión puedo haceros participe de las impresiones que
me causaron, no dudéis que así lo haré.
“En el lecho de
muerte, María Francisca, miembro de una noble familia de Toledo, clama
desesperadamente por sus hijos. La tensión es enorme: nadie de los presentes
conocía que la joven hubiera tenido descendencia. Su madre niega sus palabras,
pero sus tías no dejarán de preguntarse qué hay de verdad en ellas. Comienza
así una apasionante inmersión en la historia de las mujeres Camp de la Cruz,
Mariana, Munda y Alejandra, herederas de un hacendado español, y de sus
irreconciliables diferencias vitales en la búsqueda de la felicidad”.
Inma Chacón, fue la finalista del Premio
Planeta 2011 con esta historia de mujeres valientes y luchadoras a la que no le
faltan hombres bravíos a pesar de gozar de un merecido papel secundario. Como
todas sus novelas son historias bien contadas, de impecable ambientación, con
caracterizaciones soberbias y protagonistas inolvidables.
Historia de saga familiar contada con idas y
venidas en el tiempo, saltos temporales que van dando a conocer la esencia de
esta tribu de mujeres en los finales del siglo XIX y principios del XX. Además
de la vida de estas fascinantes mujeres, sus personalidades y los avatares
entornos al amor, los celos, el desamor y la lucha, Inma nos deleita con el
tema de la Masonería con un tratamiento inteligente que le sirve como escenario
para los guiños a la lucha por los derechos de la mujer en unos momentos de la
Historia donde estos “brillaban por su
ausencia”.
No puedo contar nada malo de las novelas de
Inma Chacón, es evidente que me gustan, las disfruto, aprendo de los buenos
retratos sociales de cada época que trata, de su sencillez a la hora de narrar,
de sus toque emotivos y de sus deseos de hacernos feliz con sus relatos. Son
novelas que se quedan en el corazón y de las que guardo un grato e inolvidable
recuerdo. Os gustará.
“Buscando el bien de nuestros semejantes,
encontramos el nuestro propio”.